Aida Espinosa
El presidente municipal de Nahuatzen, David Otlica Avilés denunció la nula presencia de elementos de seguridad ante la situación que vive el municipio por la presencia de comuneros armados, a quienes calificó de grupo delictivo, a quienes les exigió la entrega de las instalaciones de Palacio Municipal.
En entrevista, informó que este miércoles la comunidad organizada exigirá también el restablecimiento del orden, por lo que avizoró una situación complicada en la Meseta Purépecha.
Refirió que hasta el momento no tiene reporte de armamento robado por parte del grupo indígena, por lo que las 18 armas que tiene el municipio se encuentran bajo resguardo del Ayuntamiento.
Aseguró que el ultimátum dado al grupo comunal por parte de la ciudadanía, es muestra del hartazgo al hostigamiento del que han sido víctimas.
Informó que ha recibido amenazas de muerte, sin embargo continuará trabajando hasta el momento sin apoyo, dijo, del gobierno estatal, por lo que el municipio se encuentra sitiado.
«Desgraciadamente se ha usado de mala forma la cuestión de los usos y costumbres. Han tomado la bandera indígena como escudo cuando no corresponde y no debería de ser así. Esas personas se han colgado de un derecho que no les corresponde. Se han tratado de victimizar ante los medios de comunicación, cuando son los que ponen de rodillas a la población», comentó.
