Aida Espinosa
El Congreso de Michoacán entregó este lunes al Padre Francisco Martínez Gracián, la presea Melchor Ocampo por su trabajo en las comunidades originarias.
En su discurso, el recipiendario de la presea indicó que los pueblos originarios requieren políticas públicas enfocadas en terminar con el rezago, la discriminación y la breca de desigualdad que los ha mantenido en la pobreza en diferentes índoles a lo largo de la historia, no sólo “políticas apaga fuegos”.
Por ello, exhortó a las instituciones gubernamentales a etiquetar mayor cantidad de recursos en materia educativa, social, de desarrollo, entre otras.
“Falta de un sistema educativo inculturado; carencia de obras básicas e infraestructura de caminos, escuelas, hospitales, y reclamos de justicia, fracturación, desmembración de juchari echerio, nuestro territorio, devastación de nuestros bosques, invasión de nuestras tierras, abuso de monocultivos y de otras pandemias, de ininterrumpida manera desde hace quinientos años”, mencionó.
Si bien, dijo, Melchor Ocampo comprendió la multiculturalidad de la entidad, hoy los gobiernos no hacen justicia a sus ideales, pues han dejado en el abandono a los pueblos indígenas.
“En vez de empantanarnos en nuestras diferencias debemos mantenernos unidos y para conseguirlo, una de las vías es traer a coalición nuestras raíces étnicas”, agregó.
